Papa querido, papa del alma, no sé
cómo comenzar estas palabras, por tanta emisión que me embarga.
Hoy es un día muy triste querido
papá. A pesar de tus aparentes dificultades, eras un hombre muy inteligente.
Dios te dio un don de captar todo lo decían por señas y movimientos de labios.
Y así te informabas de todo lo que pasaba a tu alrededor, por ejemplo sabias
que tu vecino Hilario se había ido al hospital, y que tu ahijado Rafael a quien
llamabas al pacito, se había accidentado.
Papá te gustaba trabajar en el
campo, especialmente con tiempo malo. Nada era imposible para ti, por ejemplo
cercar, no sé como lo hacías, pero lo terminabas sin la ayuda de nadie.
Papá, le agradecemos a Dios de
ser tus hijos, estábamos muy tristes, pero contentos de haber compartido esta
vida contigo. Nunca pensamos que partirías tan pronto, pero te acompañamos en
todo momento. El instante más triste fue cuando el médico nos dijo que
pasáramos de a dos los familiares, era hora de despedirse. Fue difícil decidir
quién iría primero, primero esperaste a que todos entraran: Germán, Carmen,
Mario, Pancho, la Cristina y elegiste a Iván y a mí para verte partir.
Siempre recordaremos tu chispa
infantil, tus travesuras, tus bromas, nos hicistes muy feliz, estamos
agradecidos de Dios de haber dado un padre como tú.
Gracias a toda la gente que lo
visito en su proceso de enfermedad, tanto en el hospital como en Dalcahue y
aquí en la Isla.
Hoy te decimo adiós para siempre
de tu presencia física papá Jacinto, pero vivirás en el recuerdo de cada uno de
tus seres queridos, que te amamos aquí en la tierra, pero también en la memoria
de cada habitante de esta Isla.
Gracias a todos en nombre de mi
mamá, hijos, nietos, yernos y nueras: A los que nos acompañaron, a los que
viajaron con tanta dificultad y a los que llamaron por teléfono, a todos
ustedes muchas gracias.
Palabras escritas por su hija
Enriqueta Villegas para su querido padre Jacinto Villegas Villegas, el día de
su responso fúnebre, Isla Tac 28 de Octubre 2014.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario